martes, 25 de septiembre de 2018

El origen REAL de los vaqueros

¡Buenos días rockers!

Ays los jeans, los vaqueros... esa prenda que usamos casi a diario y no sabemos dónde tiene su origen... ¿o sí lo sabéis? Claro clarinete, es la prenda por excelencia de nuestra época pero nacieron como ropa de trabajo hecha con tela de tiendas de campaña.

¡Vamos, seguid leyendo! ¡Que seguro que hay info que no conocéis!

Como tantas otras cosas, en el imaginario popular los vaqueros son una prenda de vestir eminentemente estadounidense que nos lleva a pensar en los mineros, en el Lejano Oeste, los granjeros.. Sin embargo, su origen real se sitúa en Europa y se trata de una invención de europeos inmigrantes en el Nuevo Continente.

Para empezar, el tejido del que están hechos viene de Francia. La palabra denim proviene de "sarga de Nimes". La sarga es una tela con un ligamento característico que produce líneas diagonales. El denim se fabrica de la misma manera, pero con algodón y haciendo que la trama sea de color blanco y la urdimbre de color azul. En el siglo XVII la industria textil cobra fuerza y era habitual que los tejidos se denominaran con el nombre de la ciudad en la que se fabricaban: así, la sarga de Nimes se convirtió, sencillamente, en denim.

Los primeros testimonios sobre el tejido podemos encontrarlos, precisamente, en el Museo del Viejo Nimes. Se trata de ajuares de las comunidades campesinas luteranas, que fueron erradicadas por el rey Luis XIV, y en ellos se pueden ver pantalones, chaquetas y chalecos hechos con esta tela, teñida en azul sombrío con glasto para su uso en la confección de prendas.

Se sabe que en origen estaba pensada como tela para hacer las velas de los barcos y las tiendas de campaña, aunque por su gran resistencia y flexibilidad, acabó siendo utilizada también para ropa de trabajo. En 1817, los oficiales de la marina de Estados Unidos empezaron a vestir el dungaree, una pieza hecha de denim pero fabricada en Dongari Killa (India) porque era de fácil mantenimiento.

Durante la fiebre del oro, Loeb Strauss (más tarde Levi), un judío alemán inmigrante, empezó un negocio de suministros para los mineros, entre ellos, de tela. Y aquí entra en juego el auténtico y olvidado genio de la historia: el letón Jacob Davis. Sastre de profesión, emigró desde Riga a Estados Unidos con 23 años y pronto empezó a trabajar cosiendo ropa de trabajo y tiendas de campaña. Era uno de los clientes habituales de Strauss.
Jacob Davis                                  Levi Strauss
Un día, una clienta le pidió que buscara una manera de que no se le descosieran los bolsillos al pantalón de su marido... y a Davis se le ocurrió el refuerzo tacheado. La idea se propagó como la pólvora por California y empezó a estar desbordado de pedidos, por lo que le pidió a Strauss asociarse con él.

Consciente de la magnitud de la idea, la registró en la oficina de patentes y ribeteó con hilo naranja sus pantalones para distinguirlos de la competencia. Y ASÍ UN LETÓN Y UN ALEMÁN CREARON CON TELA FRANCESA EL SÍMBOLO DE LOS ESTADOS UNIDOS...

Y colorín colorado, este cuento se ha acabado.

AU REVOIR!!

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡Gracias por tu comentario!